Cosas que revisar antes de salir a pedalear

Supongamos que gracias a nuestros consejos, cada día te estás animando más a coger la bici. Ya no solo es un hobby de fin de semana, sino que además se ha convertido en un hábito. El trabajo, la compra, mantenerte en forma… Cualquier excusa es buena para coger la bici. La cuestión es que de tanto uso empiezan a surgir más dudas, ruidos en tu querida bici y cualquier pequeña variación en ella la notas en seguida.

Llegados a este punto, hay una serie de cosas que tener en cuenta antes de salir. No hace falta mirarlo todos los días, con estar pendiente de vez en cuando es más que suficiente.

En lo que respecta a la bicicleta:

  • Las ruedas
    Comprueba siempre la presión de la cámara. Si usas una bicicleta de carretera (típicas ruedas de 700x23c) puedes ponerle presión entre 5 y 8 bares. En una bicicleta de montaña, entre 3 y 5 bares. Siempre dependerá de nuestro peso (a menor peso menos presión) y de la «sensación» que tengamos sobre la bicicleta. Es muy importante tener en cuenta que si no llegamos a la presión mínima recomendada por el fabricante es muy probable que con el tiempo la rueda pierda presión, por eso, si vemos después de una semana (pedaleando o no) que las ruedas han bajado, no pensar que están pinchadas.
    También es importante revisar el estado de la cubierta. Si hemos perdido dibujo (no se nota pasando la uña, o ni siquiera lo vemos a simple vista) debemos cambiar nuestras cubiertas lo más pronto posible. No hay una medida para esto, todo dependerá de la caña que le metas a la bici. Hay gente que puede aguantar con las mismas cubiertas un año, y sin embargo a otros les duran apenas 6 meses.
    También es bueno revisar los radios, tocando la cabeza del radio, comprobando que no esté suelto ninguno.
  • Los frenos
    Tan fácil como empujar la bici hacia adelante y hacia atrás y comprobar que tanto en uno como en otro sentido el freno actúa. Si tenemos frenos de disco (MTB), mecánicos o hidráulicos, notaremos que estos clavan de una manera más firme. La maneta tampoco debe estar «suelta». Cada maneta tiene un recorrido antes de empezar a actuar, este recorrido no debe ser demasiado grande.
    También hay que revisar el estado de las zapatas, comprobar que no rocen, y de los discos de freno, si están o no dañados.
  • Cables
    Hay que comprobar que los cables están sujetos, tirantes y que no se han soltado de ninguno de los puntos de anclaje al cuadro
  • Cadena
    Si la última vez que salimos con la bici la cadena «chirriaba», hay que engrasarla. No es nada grave. Pero también hay que tener en cuenta el tiempo de vida de las cadenas. Si usamos algún tipo de aplicación para registrar nuestras salidas en bici, deberíamos cambiar la cadena una vez llegemos a los 1500 o 2000 kilómetros. Una cadena vieja puede darnos un disgusto cuando estamos en ruta, incluso puede afectar a los componentes de nuestro cambio
  • El sillín
    No es muy habitual, pero a veces el sillín se va aflojando y perdiendo altura con el uso. Una manera de tener esto controlado es asegurarse siempre de que llevamos la altura correcta. Si un día nos sentimos más abajo o incluso nos empieza a doler la rodilla por la parte de delante es que ha bajado un poco. Como truco puede ser el pintar un punto en el cierre de la tija a la altura del cuadro con un rotulador indeleble para comprobar que sigue en el mismo sitio.
  • Dirección
    La horquilla debe girar de manera suave. Si vibra, suena, o notamos un roce, se puede haber movido/dañado alguna de las partes que componen la dirección. Es posible que la sujeción de la horquilla con la potencia se haya movido, o que la grasa de montaje que llevan las bicis de fábrica haya cogido suciedad. En cualquier caso, debemos llevar la tienda a nuestra tienda preferida.

También es muy recomendable pasar una revisión anual de la bici. De esta manera tendremos siempre a nuestra compañera lista para salir, y nos ahorraremos sustos y reparaciones costosas.

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