deteibolsMadrid 12/09/2016.
La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, presentó en la mañana de ayer la Semana de la Movilidad 2016 que, con la mirada puesta en limpiar el cielo de la capital, –“no está bonito, está como tupido”, dijo-, recibirá en adelante el nombre genérico de La Celeste. En el acto, celebrado en Matadero Madrid, también participaron la delegada de Medio Ambiente Sostenible, Inés Sabanés, que depositó muchas esperanzas en el Plan del Calidad del Aire, y el delegado de Desarrollo Urbano Sostenible, José Manuel Calvo, que puso en valor los nuevos itinerarios ciclistas para la integración de la bicicleta en la ciudad y para quitar espacio al coche.
La Celeste, denominación elaborada por el departamento de Comunicación municipal, pretende convertirse en “la fiesta de la Movilidad Sostenible en septiembre, dónde se hace un homenaje a la bicicleta, al peatón y al transporte no contaminante”. En esta primera edición, cuenta con la participación especial de la EMT y de Madrid Salud, “aliados principales”, además de la colaboración de empresas y entidades colaboradoras como SER/Radio Madrid, CRUMA o el mismísimo Reino de los Países Bajos
El programa de actividades dará comienzo el próximo viernes día 16 con el Park (in) Day, que otorga temporalmente diferentes usos (huerto, biblioteca o mesa de ping-pong) a muchas plazas de aparcamiento, y terminará el jueves 22 con el Día Sin Coches, en el que la alcaldesa volverá a acompañar con su bicicleta eléctrica a los alegres escolares del proyecto STARS. A diferencia del año pasado, y a mayor satisfacción de Esperanza Aguirre, este día no se cerrará al tráfico la Gran Vía, aunque si habrá cortes significativos el sábado 17, con el festival Actúa Madrid, y el domingo 18, con motivo del ya consolidado Pasea Madrid. (Para más información acerca de las diferentes actividades, pincha aquí)
Además de la tercera edición de Unibike (Feria de Madrid, del 22 al 25), el efecto locomotora de La Celeste regala a los madrileños un gran número de marchas y actividades ciclistas por distritos, más o menos reivindicativas, que culminarán el próximo día dos de octubre con la tradicional Fiesta de la Bici, que, ni La Celeste ni «la» Manuela han conseguido, por el momento, que deje de celebrarse en domingo.
Esperamos que los efectos depurativos de La Celeste hagan de Madrid una ciudad “más respirable y más habitable”, tal y como se anuncia, más allá de la semana en cuestión. Y que un buen número de estas excepcionales medidas acaben convirtiéndose en permanentes, incluso celestiales.
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